El sistema de salud se prepara para el post COVID-19

El ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz Gómez, explicó la situación por la cual atraviesa el país en esta etapa de la pandemia en la que es importante tener en cuenta las medidas de prevención desde casa y tener, a futuro, un sistema basado en ese aspecto y en la medicina familiar.
"Esta pandemia ha puesto en evidencia debilidades, pero también fortalezas del sistema de salud colombiano. Si ponemos en la balanza los resultados que hemos tenido hasta el momento en el país, podemos decir que son más las fortalezas. Colombia ha podido responder desde lo asistencial y epidemiológico, crecer en capacidad diagnóstica, de atención y de vigilancia. La respuesta que hemos dado nos muestra esas fortalezas", aseguró el jefe de la cartera de Salud, explicando además que las debilidades tienen que ver con las limitaciones de algunos territorios para el acceso a los servicios, al control y vigilancia.
El ministro afirmó que, si se hace la comparación de Colombia con otros países de Latinoamérica, o con los casos español e italiano, por ejemplo, se hace referencia a un sistema que no tuvo un colapso.
"Nosotros tenemos la tarea pendiente de desarrollar muchos de los planteamientos que contiene la Ley Estatutaria de Salud y eso tiene que ver especialmente con el acceso y disponibilidad de servicios. En la pandemia la gente dejó de ir a los hospitales, se dejó de ir por muchas razones, principalmente por el temor", aseguró.
Frente a eso, señaló, lo que desarrollamos como país fue la posibilidad de consulta ambulatoria domiciliaria y teleconsulta. "En esto último avanzamos lo que no se pudo en los últimos 10 años. Esto nos da una idea de un sistema que tiene una flexibilidad importante, que tuvo que adaptarse, pero que saldrá de una manera diferente a como entró", afirmó el ministro.
El ministro de Salud indicó que el sistema tendrá que pensarse en su desarrollo a futuro como un sistema mucho más centrado en el paciente, "lo cual viene de la Ley Estatutaria, pero también en la posibilidad de los servicios ambulatorios primarios más que en la capacidad resolutiva hospitalaria. Ese es uno de los grandes aprendizajes de la pandemia".
Ante esto, dijo, se han ido recogiendo temas y aún hace falta tomar mayor evidencia de lo que ha sucedido. Basados en eso, el Gobierno tiene claro que hay que hacer ajustes al sistema de salud, ajustes que impliquen una transformación, no una reforma. "Hay muchos de estos actores que buscan acabar el sistema y levantar otro, pero cuando nos vamos al planteamiento de ese otro se encuentra un desierto, donde no hay ideas, simplemente la antítesis de acabar todo".
Dentro de los temas fundamentales está la concentración en lo ambulatorio, atención centrada en el paciente, atención al ciudadano, que su primera puerta de entrada no sea la de urgencias, por lo cual el sistema debe llegar lo más cerca a la residencia.
El ministro explicó que se deben reforzar algunas áreas, especialmente con lo que tiene que ver con el manejo de enfermedades crónicas, que seguramente será después de la transición epidemiológica. "La enfermedad cardiovascular, cáncer o enfermedad mental son temas críticos y el sistema debe responder teniendo rutas estructuradas para atender a la población y un seguimiento preciso al ciudadano".
Ruiz Gómez detalló además que el Gobierno Nacional ha dado apoyo al proyecto de ley 010, una iniciativa bajo la cual se impulsa un proceso de transformación del sistema. Dentro de ese proceso hay un tema muy importante, es la atención médica con un enfoque de medicina familiar.
Esto último se traduce en que "cada persona tenga un respondiente con nombre propio, que no cambie cada vez, que sea un sistema en el cual yo tengo mi médico, me conoce, sabe cuáles son mis patologías, tengo capacidad de hablarle y que conozca mis problemáticas. Sobre esa base, un enfoque centrado en el paciente, consolidar un sistema en el que se trabaje la prevención".
"La epidemia nos ha enseñado a prevenir, a usar tapabocas, guardar distanciamiento. Nuestra visión colombiana siempre era lo curativo, llegar al hospital por urgencias. Tenemos que pensar y centrarnos en prevención, atención domiciliaria y medicina familiar", añadió.
“Es el momento clave de la responsabilidad y la solidaridad”
De otra parte, el ministro de Salud hizo una invitación a no bajar la guardia y no permitir que las aglomeraciones y la falta de disciplina social conlleven a perder lo ganado hasta ahora frente a la pandemia.
"El llamado es a guardar la calma, tener prudencia y ese conocimiento como ciudadanos, que en esta etapa de aislamiento selectivo con responsabilidad individual todos tenemos que ser solidarios y responsables frente a la afectación", indicó.
Añadió que se debe tener claro qué es lo que viene, ya que se tuvo un primer pico que representa la mayor afectación y que se ha venido reduciendo en número de casos de contagio y fallecimientos, pero que eso no debe generar una falsa percepción de que todo pasó.
Ruiz Gómez aseguró que "en los análisis que hemos hecho con el comité estratégico y el comité de expertos nacionales e internacionales, revisando toda la situación del país en las dos últimas semanas, para nosotros hoy es claro que la apertura económica no nos ha generado una mayor afectación en crecimiento de casos, pero lo que sí nos está generando riesgo son las situaciones de aglomeración y las situaciones en las cuales se junta gente y genera posibilidad de transmisión y aumento de contagio".
Se han evidenciado dos escenarios que aumentan las probabilidades de contagio: en las casas, cuando llega la familia extendida o amigos y se obvian las medidas de bioseguridad, exponiendo a la misma población de riesgo del núcleo familiar, como lo son los adultos mayores de 60 años o personas con enfermedades prexistentes.
El segundo son las aglomeraciones en espacio público. Frente a ello, el ministro enfatizó que se debe ser consciente del alto riesgo de afectación que se puede dar y mencionó que ya está sucediendo en ciudades como Bogotá, Medellín y Cali.