Evolución histórica de la planeación en el INCI y el país

Los temas de planeación en el Estado colombiano se remontan al año 1923, a partir de la contratación externa dada la inexperiencia de los gobernantes de la época en el manejo de asuntos en materia económica, así es como se encarga al grupo de expertos de la denominada Misión Kemmerer[1], para brindar asesoría en la organización de finanzas públicas, impuestos, aduanas, contabilidad y crédito público. Posteriormente, hacia el año 1930 nuevamente se contrata la mencionada misión para dar continuidad en los temas desarrollados.
A finales de los años treinta y cuarenta, el tema de la institucionalidad en el marco de la planeación fue complejo e inestable porque cada gobierno imponía su propio criterio; creando, suprimiendo y reformando entidades, atendiendo muchas veces las recomendaciones hechas por las diferentes misiones contratadas, las sugerencias de los organismos internacionales y también por las situaciones políticas propias de los cambios de gobierno. En 1948 se contratan los servicios de la Misión Currie[2], liderada por el académico y economista canadiense Lauchlin Currie, con el propósito de hacer un estudio a fondo de la situación económica del país y orientar un programa de desarrollo para Colombia.
Como producto de las recomendaciones dadas en 1952 por esa misión, se creó la Oficina de Planificación, que en 1953 pasó a ser el Consejo Nacional de Planificación Económica y que un año más tarde se convertiría en el Consejo Nacional de Economía y el Comité Nacional de Planeación. Ya para el año 1958 se da un paso importante creando mediante la Ley 19 el Departamento Administrativo de Planeaciones y Servicios Técnicos, conocido en la actualidad como Departamento Nacional de Planeación -DNP.
Después de la creación del DNP, se inicia la elaboración de Planes Nacionales de Desarrollo en cada periodo de gobierno, con el propósito de estructurar documentos con enfoques dirigidos hacia el crecimiento económico del país, enfocados en el proceso de planeación. Paralelamente, se promulgaron normas para la organización de las instituciones estatales en dicho ordenamiento jurídico del estado, tales como los Decretos - leyes 1050 de 1968, 3130 de 1968, 130 de 1976 y dentro de la vigente Ley 489 de 1998, se destaca la clasificación de las entidades y se brindan regulaciones para el funcionamiento de las mismas. Así es como el tema de programas, proyectos y planes se hace potestad de la alta dirección y dependiendo de la estructura, tamaño y clasificación de la entidad se cuenta con un asesor, hasta una dependencia que apoya el despliegue de los temas propios de planeación.
El INCI, desde su creación en el año 1955, que coincide con los inicios del desarrollo histórico de la planeación en nuestro país, también ha desplegado el tema acorde con los lineamientos del Alto Gobierno, siguiendo las instrucciones que se adelantan desde el Departamento Nacional de Planeación y aplicando todas las metodologías propuestas por dicho ente rector, pasando de la generación de propósitos y promesas a un documento que contiene la propuesta de la alta dirección acerca de las acciones que se planean desarrollar hacia el futuro y cuyo contenido en general tiene en cuenta los componentes denominados: diagnóstico de la situación, formulación acciones y tareas, programación de responsables y tiempos, estrategias y presupuesto.
Precisamente de esta manera es que ha evolucionado la construcción de la planeación en nuestra entidad, desde los principios sobre administración promulgados por los reconocidos Henry Fayol y Frederick Taylor, pasando por el modelo japonés denominado “Las claves del éxito”, el Modelo de Planeación Estratégica, hasta el actual Modelo de Operación por Procesos, el Modelo Integrado de Planeación y Gestión -MIPG y el Modelo para Identificación de Proyectos, utilizado por el Departamento Nacional de Planeación conocido como Metodología General Ajustada -MGA, que se basa en la herramienta enfoque de marco lógico.
La evolución de las teorías ha venido de la mano con los adelantos sobre ciencia y tecnología, y existen múltiples herramientas que brindan solución según el requerimiento del usuario, pero es indiscutible la participación del factor humano en la construcción del proceso de planeación, desde el diagnóstico hasta la puesta en marcha de las soluciones que brinden beneficio a los interesados, en nuestro caso, de cara a la población con discapacidad visual del país.
[1] Grosso Rincón, Carlos Arturo. 2009. Desarrollo histórico y ámbito de acción de la planeación en Colombia. Administración & Desarrollo 37 (51): 39-58. Encabezada por el profesor de economía norteamericano Edwin Walter Kemmerer.
[2] Ídem. Dirigida por el economista Lauchlin Currie, de nacionalidad canadiense, la cual fue financiada por el BIRF.
Autor:
Ricardo Hernández Mateus
Jefe Oficina Asesora de Planeación INCI
Instituto Nacional para Ciegos - INCI