Enseñar, siempre será la clave para incluir.

El pasado 16 de septiembre tuvimos la oportunidad de dictar una capacitación desde el Centro Cultural del INCI del cual formo parte como funcionaria, dirigido a los servidores públicos de las distintas Entidades del Estado; un taller al que en un principio temíamos no fuera llamativo para las Entidades y sus funcionarios, pero que por el contrario superó nuestras expectativas contando con gran participación, acogiendo a más de cincuenta asistentes de todas las áreas como Gestión del Talento Humano, Atención al Ciudadano, Control Interno, Planeación, entre otras.
Allí se abordó la manera correcta de interactuar con personas con discapacidad visual, para derrumbar tantos imaginarios que tiene la sociedad en general de esta población.
Es importante que no solo las personas que trabajan con el Estado, sino toda la sociedad en sí, conozca la realidad que vivimos las personas con discapacidad visual. No para que nos tengan lástima, o para que nos vean como superhéroes, sino para que se tome conciencia del valor que como seres humanos tenemos, sin que lo que primero que se mire sea la deficiencia funcional, sino la persona; las características de cada individuo. Solo así podremos disfrutar de una verdadera inclusión en la sociedad.
Como persona ciega, me siento verdaderamente afortunada de aportar de esta manera a mi país, puesto que del cambio de mentalidad que tenga cada persona, depende mucho el desarrollo personal, social, laboral, educativo y de todos los aspectos de la vida de las personas con discapacidad visual.
Sé que la información no llega a todos los que quisiéramos. A lo mejor algunas de las cosas que decimos en estas capacitaciones se olviden. Pero estoy segura que la manera de cambiar el pensamiento de muchos, es enseñando aquello que no conocen, aquello que ignoran. Esa es mi manera más real y directa de poner un granito de arena para convertir a Colombia en un país mucho más incluyente.
Por eso desde el INCI, seguiremos abriendo nuestras puertas y visitando cada empresa, establecimiento educativo, ministerio, institución y a cuanto lugar nos inviten para enseñar que la discapacidad solo está en la mente de quien mira al que vive con una deficiencia funcional en su vida, y que de todos depende que no exista ningún tipo de discriminación hacia esta población.